Reseña

En los albores del siglo XX, un inesperado infortunio, ocurrido a bordo de un trasatlántico, une para siempre los destinos de Anna, Samuel y el pequeño Henry -una familia suiza que viaja rumbo a Sudamérica- y de Victoria, una joven viuda inglesa. Hermanados por una estrecha amistad, los recién llegados europeos deciden instalarse en una casona del cerro Alegre de Valparaíso, junto a otros inmigrantes que habitan en el bullente puerto del Pacífico.
Mientras los adultos se van empapando cada vez más de la realidad del país y la ciudad que los acoge, Henry crece y se convierte en un joven impetuoso y lleno de inquietudes, que forja su propio camino al aceptar una misteriosa oferta de trabajo en La Flor de Nieve, una enigmática oficina salitrera del norte del país. En ese lugar, que no aparece en los mapas y del que pocos hablan, Henry conocerá la ardua vida de los trabajadores del salitre y será parte de una secreta misión, que le obligará a separarse por largo tiempo de sus seres queridos.
En paralelo, y a miles de kilómetros de distancia, en un sanatorio mental en Suiza, una mujer lucha por no perder su cordura entre los laberintos de su pasado.
La autora chilena-suiza Rosmarie Schoop Olivares nos ofrece en “La Flor de Nieve y los secretos del desierto” un magnífico retrato del Chile del siglo XX, a través de una obra literaria profunda, sensible y multicultural, que recoge la mejor tradición de la novela histórica y la saga familiar, navegando a través de hitos como la migración, el auge y descenso de Valparaíso, y los movimientos obreros y feministas, sin dejar de lado el amor y los ideales como motores de la alma humana.