Reseña

Santa mArica
Trasvestismo ritual andino santificado
Lily Jiménez O. investigación
Yaroslavl Riquelme W. autor fotografa artista
Fernando Rivera R. produccion
Santa mArica es un trabajo de creación e investigación artística que se basa en el fenómeno de las bailarinas travestis del folklore boliviano cuya influencia se extiende a Arica a través del Carnaval Intencional Andino Con la Fuerza del Sol, celebrado en febrero de cada año desde 2002. Este proyecto consiste en la creación de imágenes que asemejan estampitas católicas, teniendo como protagonistas a bailarinas trans de las fiestas religiosas con diferentes atributos. Usando las técnicas de intervención digital, registro fotográfico e inteligencia artificial, cada una de estas imágenes está asociada a una oración que se enfoca en una petición de la comunidad trans: derecho y acceso a la salud digna, cupo laboral trans, protección en traslados nocturnos, elegancia y ayuda en el baile devocional.
Esta investigación nace a partir de la historia de las Chinas Morenas Travestis que David Aruquipa ha puesto de relieve en Bolivia, nombrándola como una revuelta estética, social y cultural. El destape de las Chinas Morenas Travestis en las fiestas de El Gran Poder y el Carnaval de Oruro a mediados del siglo XX implicó abandonar las máscaras rituales y presentarse socialmente desde una diferencia sexual abierta. Anidadas en el fenómeno del trasvestimo ritual andino, las chinas morenas desafiaron el orden heteronormado con sus vestuarios, risas y actitud. Polleras cortas, botas bucaneras, lentejuelas y pedrería fueron sólo algunas de las adiciones que crearon una nueva figura independiente que adornaba y enaltecía a las cofradías que las aceptaban o invitaban a bailar. Queridas y animadas por la comunidad, las Chinas Morenas Travestis fueron una punta de lanza en la aceptación de mujeres cisgénero dentro de los cuerpos de bailes religiosos, demostrando su importancia para el cambio social en tiempos de represión y recrudecimiento de las dictaduras en Latinoamérica. A principios del siglo XXI, estas figuras históricas fueron reencarnadas por la Familia Galan, una asociación de artistas LGBT+ que, sin saberlo en primera instancia, escribieron un nuevo capítulo en la historia de la visibilidad de las disidencias sexuales en el ámbito andino.
Las Santas Maricas de este proyecto acrisolan una tradición rebelde y alegre que nos recuerda cómo las creencias y los afectos son cruciales para la memoria y la lucha colectiva. Así, estas nuevas santas se inscriben en una tradición latinoamericana de lo sagrado, donde personajes controvertidos o populares son objeto de devoción popular: la cantante Gilda, la Difunta Correa, el Gauchito Gil o la Botitas Negras en Chile son sólo algunos ejemplos de estas otras ambigüedades santas que se caracterizan por atender necesidades que otras figuras institucionales no pueden abarcar. En esta exposición podemos encontrar a una Santa Whapuri Galan, líder de la Kullawada, representada por tres personas como una nueva trinidad andina trans, dirigiendo uno de los bailes más importantes de la Fiesta del Gran Poder. O a una Santa Guacolda, de vestimentas españolas, que proteja de baches en el camino a todes les bailarines del cuerpo devocional. Y también a una Santa mArica, mamita de todas, protectora original para todes quienes deseen resguardarse bajo su manto.