Reseña

Esta novela del famoso escritor Walter Garib, fue escrita en los
albores de la década de 1980, en un tiempo extraño y opresivo para
Chile, un lugar con otros colores, con un aire difícil de respirar,
con el miedo a la vuelta de la esquina.

Nadie quiere morir al amanecer obtuvo el segundo premio de
novela en los Juegos Literarios Gabriela Mistral, de la ilustre
Municipalidad de Santiago, en 1982. Garib aún conserva el diploma
que le fue otorgado con la firma del oscuro
alcalde de la época Carlos Bombal.

Por extrañas circunstancias, a pesar de aquel reconocimiento,
esta novela cayó bajo la lupa de los funcionarios de la dictadura
que aprobaban las obras, películas o libros que podía salir a la luz
pública. Quedó en la penumbra, manteniéndose inédita hasta hoy.

Adelante, pueden entrar en las páginas de un pasado reciente, de
una historia de deseo, de divagaciones moribundas,
de un país que alguna vez fue.