Tormentas del miocardio
En su breve viaje por este mundo, Ed Wilku dejó un puñado de versos como testimonio de sus visiones amorosas y críticas del entorno natural y humano en el que desarrolló su existencia.
En ellos, su imaginario dio cabida a las manifestaciones contemporáneas del arte, principalmente de la literatura, de la música y del cine, donde su lenguaje –en inconclusa evolución– logró incorporar elementos surrealistas, del humor absurdo y de la ecología. [...]
Este libro procura ser testimonio y tributo a su personalidad como creador y como amigo. (C. Riedemann)