Alerces
Reservorios del tiempo
“Es el tiempo amplio del árbol el que interroga al tiempo breve de los humanos. El territorio invoca recogimiento. ¿Cómo sobreviviste a todo lo sucedido? ¿Acaso no pudieron talarte? ¿Cómo no te encontró la industria maderera y su maquinaria extractiva? ¿Debemos entender que eres un guardián del territorio? ¿Qué has venido a decirnos?”.
El filósofo Pedro Pablo Achondo ha caminado durante años entre bosques de alerces (Fitzroya cupressoides), a paso lento, entablando una comunicación entre lo humano y lo vegetal, la palabra y la raíz.
El estudio de los anillos de los troncos, el registro de la extracción forestal, el oficio de tejueleros y guardabosques, una reflexión vibrante en torno al territorio y el tiempo, surgen en este ensayo escrito bajo la custodia de gigantes milenarios.