El lugar de las cosas
Es este un libro lleno de hallazgos, de gozo y dolor. Una poesía prístina, reposada, de una hablante que viene de vuelta, observa hacia atrás y nos habla de su experiencia de vida en todos los ámbitos: el oficio de escribir, el amor, el exilio, lo que significa ser mujer, el tiempo, la muerte. Alicia se impone la tarea de ordenar sus archivos mentales, reunir los vestigios de la memoria y desde allí escribe, sin miedo a ver la cara de la muerte en su propio rostro. Ese lugar de las cosas que nos propone es una mirada a la vez personal y universal, una forma de darle carne y humanidad a las palabras.